La cordillera ha devenido en el escenario de un gran número de actividades de turismo aventura tales como: raffting, cabalgatas, rapel, tirolesa, kayac, etc. Nuestros programas ofrecen las siguientes opciones:
Trekking:
Significa caminar por terrenos de pendientes moderadas: recorriendo quebradas, aproximándonos a los campos base de cerros de alta montaña o subiendo cerros de baja altura (hasta 4500 m).
De acuerdo a la duración de las jornadas y la altura alcanzada se puede clasificar su dificultad en:
Leve
Jornada de 2 a 4 horas de marcha, hasta 3500 m de altura
Moderada
Jornada de 4 a 6 horas de marcha hasta 4000 m de altura
Difícil
Jornada de 6 a 8 horas de marcha hasta 4500 m de altura.
Estas actividades se desarrollan llevando una mochila liviana con agua, abrigo y comida de marcha, estableciendo campamentos o pernoctando en refugios, según las características del lugar.
Para realizar trekking se requiere un estado básico de entrenamiento aeróbico y en el caso de los de dificultad moderada a difícil, se necesita además de buen estado aeróbico, poseer resistencia para una actividad de demanda física prolongada.
Ascensionismo:
Es caminar hacia la cumbre de la montaña, usando en caso necesario, grampones y piqueta en las superficies heladas. Esta actividad se desarrolla entre los 4500 m y 6900 m. Si bien no se presentan grandes dificultades técnicas, la altura y las condiciones climáticas rigurosas, representan la mayor parte del desafío.
Para realizar esta actividad se requiere entrenar con regularidad a fin de poseer rendimiento aeróbico y resistencia para una actividad física prolongada. La mayoría de estas expediciones se realizan en alta montaña, si bien los itinerarios permiten la aclimatación, se deben tener presente que se debe vigilar la adaptación del cuerpo a la altura en todo momento e hidratarse adecuadamente.